Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Lisboa en Portugal y el Royal Veterinary College en Londres encontró que las mascotas y los humanos en los mismos hogares a menudo tenían una cepa de E. coli resistente a los antibióticos en sus sistemas, según un resumen del estudio realizado por la Sociedad Europea de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas. El estudio se presentará en la próxima conferencia de la sociedad a finales de este mes.
Y aunque el trabajo de investigación no concluyó exactamente cómo se transmitía la bacteria o en qué dirección, los investigadores dicen que sí sugiere que debemos ser higiénicos en lo que respecta al contacto con las mascotas, lo que incluye evitar besarlos y lavarse las manos después de atar las bolsas de excrementos, e incluso después de acariciarlos.
Las bacterias resistentes a los medicamentos no pueden tratarse con antibióticos, lo que hace que algo que generalmente es tratable, como una infección por estafilococos, sea potencialmente mortal. En los Estados Unidos, las bacterias resistentes a los medicamentos infectan a más de 2 millones de personas y matan al menos a 23 000 cada año, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).