En los últimos días, el fantasma del 2022 volvió a hacer ruido entre la industria automotriz, comerciantes y usuarios.
çLa falta de neumáticos condicionó el año último al sector durante varios meses como consecuencia de trabas a las importaciones y un largo conflicto sindical en las fábricas locales, y la escasez derivó en aumentos de precios y crecimiento del delito.
Negociaciones mediante, se logró equilibrar la situación y reabastecer a los distribuidores. Pero a pocas semanas de comenzado el 2023, el conflicto podría reanudarse.
Por un lado, el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA) denunció la semana última que la empresa Bridgestone quiere “eliminar el premio a la producción con base fija y provocar con descuentos indebidos de impuesto a las ganancias”. Esto, según señaló Alejandro Crespo, secretario general de la agrupación, es un “incumplimiento con compromisos asumidos por escrito”.
La empresa y el gremio mantienen reuniones en el Ministerio de Trabajo para evitar que el conflicto escale. Crespo dijo que la planta de Llavallol estuvo parada desde la noche del 25 de enero hasta el turno nocturno del siguiente 26 como también en el turno tarde del viernes 27 de enero.
Además, advirtió que habrá una asamblea convocada para mañana martes 31. En caso de “no tener una respuesta positiva hacia los trabajadores” comenzarían nuevas “acciones gremiales directas” en la planta, anunció el líder sindical.
En el sector temen que el reclamo en el caso Bridgestone pueda alcanzar luego a las marcas Fate y Pirelli.
Fuente: La Nación
